Hoy os vamos a enseñar a preparar vuestras propias tartaletas de frutas, una manera muy sencilla de tener un postre riquísimo y muy sano.
Además, gustará a todos los de casa.
¡Esperamos que las disfrutéis!
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Ingredientes
- 1 masa de hojaldre
- Crema pastelera, encontraréis la receta: aquí.
- 1 kiwi
- 1 plátano
- 1 manzana roja
- 4 o 8 fresas
- 1 huevo
- 1 hoja de gelatina
- 1/2 vasito de agua
Preparación de las tartaletas de frutas
Precalentaremos el horno a unos 180º, os recordamos, que siempre la temperatura exacta; así como el tiempo, dependerá de vuestro horno.
En una bandeja de horno, pondremos papel de aluminio; o bien, papel de horno.
Batiremos el huevo y lo reservaremos.
Cortaremos la masa de hojaldre en la medida que más nos guste, la pincharemos con un tenedor para evitar que suba por el centro, lo pincelaremos con el huevo e introduciremos el hojaldre en el horno, durante 10 minutos aproximadamente (este proceso dependerá del horno que tengáis en casa).
Debe quedar doradito, pero sin llegar a que se queme.
Dejaremos que se enfríe.
Lavaremos las fresas y les retiraremos tallo.
Pelaremos y cortaremos en rodajas finitas el kiwi, el plátano y la manzana.
Con la ayuda de una manga pastelera, pondremos en el centro de la masa de hojaldre que teníamos reservada, la crema (encontraréis la receta de la crema pastelera, aquí) y decoraremos con la fruta.
Una vez tengamos este paso preparado, pondremos un cazo pequeño al fuego, con el medio vasito de agua, para que se vaya calentando. Cuando esté tibia, la retiraremos del fuego y añadiremos la gelatina.
Cuando esté deshecha o diluida, con la ayuda de un pincel de silicona, iremos esparciendo, por encima de toda la banda de frutas, la preparación; de esta manera, les daremos brillo y lucirá nuestro postre, mucho más bonito, jugoso y apetitoso.
Además, evitaremos que la fruta se oxide.
(NOTA: podéis sustituir la crema pastelera, por membrillo, mermelada, etc. Si no se consume al momento, os aconsejamos diluir una hoja de gelatina o una cucharada de gelatina en polvo en un poco de agua caliente. Cuando se deshaga la gelatina, se pinta toda la banda de fruta, de esta manera, evitaremos que se oxide la fruta y pierda sus propiedades).
¡Además, podéis usar las frutas que más os gusten!